¿Como quiero vivir?

Buenos días.


¿Como quiero vivir mi vida? ¿Quiero que mi inteligencia, mi creatividad y me esfuerzo sirva para otros o simplemente quiero vivir momento a momento sin perder la oportunidad de ser feliz? En la publicación de hoy me gustaría hablar de la felicidad y de la ilusión, si es posible levantarse día tras día con las ganas de seguir creciendo y mejorando como persona.

¿Sabéis? Antiguamente, cuando la esperanza de vida se situaba en 40 años, la gente vivía sin miedo a las posibles repercusiones que podrían tener sus actos en el futuro. Tenían 40 años para vivir, para disfrutar, ¿como se iban a negar a vivir intensamente? Cada día se levantaban con el único objetivo de buscar el placer, la satisfacción personal, sin pensar en nada más.

Hoy en día estamos demasiado preocupados en nuestro plan de pensiones, en nuestra vida de jubilados, en las miles de enfermedades e incluso en dejar de ser nosotros mismos. En la actualidad, la esperanza de vida se sitúa entorno a los 90 años y creo que tenemos demasiado tiempo para pensar y eso, en ocasiones, nos hace tontos.

Os hablare de mi. A mi me encanta la educación, me apasiona el deporte y encontrarme día a día situaciones diferentes de las que poder aprender. Me gusta escuchar a la gente que piensa diferente, a esa gente que no cumple las reglas y que no sigue al rebaño. No me gusta la desigualdad ni la gente que quiere aprovecharse de las ventajas de una situación mejor. Por todo eso, ¿que creéis? ¿que voy a dedicar mi vida a satisfacer las necesidades de gente que no lo merece o que voy a intentar transmitir mi felicidad y mi forma de ver las cosas a la gente que le interese?

Sé que nunca perderé la ilusión por los valores que marcan mi vida y eso es lo que me hace pensar que aunque pasen los años y siga dedicándome a lo mismo, tendré ganas por levantarme cada día para intentar mejorar tanto mi vida como la de la gente que me rodea.

Por el contrario, hay gente que se cree que atrae todos los males del mundo, que el universo tiene algo contra él. Sinceramente pienso que la gente que tiene esa creencia es la que no tiene el valor de admitir que su verdadero error es él mismo, que es él el que tiene que cambiar para que las cosas que tenga alrededor le favorezcan.

No quiero cambiar el mundo, simplemente quiero ofrecer mi punto de vista de las cosas. Quiero gritar aunque toda la gente me pide que me calle. Soy consciente de que mis objetivos puntuales a lo largo de mi vida cambiarán, pero la meta será la misma. Que aunque hoy me guste correr, no pasara nada si mañana prefiero andar. Al fin y al cabo, la clave para ser felices siempre es saber adaptarse a los cambios internos y hacer caso a lo que de verdad te pide el cuerpo.

Esta ha sido la forma mas especial que he encontrado para despedir esta semana en el blog. Sé que habrá gente que no piense lo mismo, pero eso aún hace mas grande todo esto.

Nos vemos el martes.

Un saludo, Miquel.