martes, 1 de octubre de 2013

¿Que quieres ser de mayor?

Buenas tardes.


En la publicación de hoy me gustaría hablar de la influencia que tienen nuestros familiares, nuestros profesores y nuestros amigos a la hora de empezar a practicar un deporte concreto. También trataré de exponer el concepto de que una cierta libertad en la toma de decisiones siendo niños nos favorece en muchos aspectos.

¿Que quieres ser de mayor? Futbolista, astronauta, piloto de aviones. Todos los niños se imaginan de mayores cumpliendo sus sueños y muchos, mientras van creciendo, van perdiendo esas ganas de comerse el mundo. Gran parte del devenir de un niño tiene que ver con los padres y los profesores, esas personas con las que comparte la gran parte de su tiempo.

En el caso de los profesores te suelen decir cuando estas en la escuela que lo mejor es ir al instituto; y cuando llegas al instituto que llegues a la universidad. No sé si es algo que se inculca a los estudiantes de magisterio (futuros profesores), pero me parece algo inútil. Lo que a un niño u adolescente hay que decirle es que tiene que ser feliz, mejor dicho, tiene que ser feliz de la forma mas educada posible. Un profesor me puede orientar en el camino, pero no me puede influir tanto ni limitarme. Un niño cuando alcance la madurez se dará cuenta que es aquello que quiere hacer en su vida y si es inteligente tomará ese camino, sino se lo llevara la corriente (la sociedad).

Por otro lado, esta el caso de los padres. Muchos de ellos se empeñan en que el niño desde bien pronto (3 o 4 años) empiece a formar parte de algún club federado. En mi opinión, como padres maduros y que quieren lo mejor para sus hijos, lo mas indicado seria que el niño entre la etapa de 3 a 9 años fuera tocando cuanto más ámbitos mejor (cursillos de natación, deporte escolar, judo,...) y si estos ámbitos son mas educativo que competitivos mucho mejor. Cuanta mas riqueza y mas variada sea su niñez, mas beneficios tendrá en el futuro.

A partir de los 10 años un niño ya se puede empezar a especializar en un deporte concreto, pero es importante que los gustos de los padres no influyan en su decisión y que el niño empiece a practicar el deporte que realmente le gusta. A esa edad también se puede empezar a competir, la competición tiene también muchas ventajas: satisfacción personal o respeto por los demás, por ejemplo.


Es importante que un niño desarrolle muchas y distintas facetas para tener mas recursos al ser adulto, pero lo más importante es que el niño sea feliz, que no sea una obligación tirarse a la piscina o ir a jugar a baloncesto. Un niño tiene que ser feliz, tiene que aprender jugando hasta que descubra aquello que le apasiona.

Para despedir la publicación de hoy decir que el jueves volverá Victor Arnau con uno de sus consejos y os hablaré de una nueva colaboradora en el blog. Ella es Irene Escobar, licenciada en Fisioterapia, que empezará su aventura de colaboración en el blog en las próximas publicaciones.

Hasta el Jueves.

Un saludo, Miquel.

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