jueves, 24 de octubre de 2013

Tu decides lo que piensas

Buenas tardes, soy Victor Arnau.

En la colaboración de hoy me gustaría hablar de la capacidad que tenemos para elegir nuestros propios pensamientos, y como estos afectan a nuestros sentimientos y a nuestro comportamiento. Por ultimo me gustaría compartir una técnica para dirigir nuestros pensamientos hacia el optimismo, ya que pensar de forma optimista os aseguro que va a mejorar nuestra calidad de vida

En primer lugar vamos a imaginar el cerebro como un televisor capaz de sintonizar muchos canales, aunque en la pantalla solo puede visualizarse uno a la vez. Este canal que estamos contemplando es un pensamiento. En el momento en que decidimos cambiar de canal, evidentemente desaparece aquello que estábamos viendo. Pues bien, con el cerebro pasa exactamente igual, ya que tener dos ideas o dos pensamientos a la vez resulta imposible.

Todas las personas, todos nosotros somos libres de elegir aquello que pensamos, aunque lamentablemente, en muchas ocasiones no nos damos cuenta de esto y nos convertimos en esclavos de nuestros propios pensamientos. En estas ocasiones los pensamientos nos deprimen, nos atormentan, y creemos que no tenemos ningún tipo de control sobre ellos. Bueno, pues la realidad es bien diferente, la realidad es que podemos entrenar nuestro enfoque cognitivo para cambiar esto. Esto no es fácil, y no se hace de un día para otro, sino que requiere de un entrenamiento mental especialmente pensado para ello.

Una de mis técnicas favoritas se denomina el pensamiento opuesto, y viene reflejada en el libro "El monje que vendió su Ferrari", cuyo autor es Robin Sharma. Consiste en identificar aquellos pensamientos negativos, tóxicos o indeseables y sustituirlos de inmediato en nuestra mente por pensamientos ejemplares. Es decir, en primer lugar debemos ser conscientes de que un pensamiento negativo se ha instalado en nuestra mente (el examen es demasiado difícil y lo voy a suspender, la carrera es muy dura y no tengo ninguna posibilidad de mejorar mi marca) y sustituirlo por un pensamiento positivo y potenciador (se que el examen es difícil pero voy a dar el máximo de mi mismo y seguro que sale bien, voy a poner todo mi empeño en esta carrera para mejorar mi marca y sentirme orgulloso de mi mismo).

Es vital poder escoger aquello que pasa por tu cabeza, ya que son tus pensamientos los que van a determinar como te sientes, y tus pensamientos unido a como te sientes va a determinar tu actuación en las situaciones que se te presenten. Como dice Robin Sharma "no podemos permitirnos el lujo de un solo pensamiento negativo, cuida tus pensamientos como cuidarías tus más preciadas posesiones. Esfuérzate por eliminar toda turbulencia interna. Las recompensas serán abundantes."

Como hemos visto, tu eres la única persona responsable de aquello que piensas y de como interpretas la vida. Si estas continuamente pensando en negativo va a ser difícil que encuentres soluciones y que tomes las decisiones correctas en tu vida. El pesimismo, además de anticipar de forma negativa los acontecimientos solo sirve para generar expectativas negativas acerca de ellos, bloquearte y desconcentrarte del objetivo. Esta demostrado que, además de contribuir al fracaso, por mucho que te prepares para fallar no te protegerás emocionalmente. Sinceramente creo que es más divertido y motivador prepararse para el éxito.

Para terminar, he de decir que muchas de las ideas de esta colaboración están extraídas de los libros "Entrénate para la vida" de la psicóloga deportiva Patricia Ramírez y "El monje que vendió su Ferrari" de Robin Sharma. Dos libros altamente recomendables para aquellos que les guste la psicología, la inteligencia emocional, o simplemente quieran crecer en su vida.

"Considero mas valiente al que conquista sus deseos que al que conquista a sus enemigos, ya que la victoria mas dura es la victoria sobre uno mismo" Patricia Ramírez

Hasta aquí mi colaboración semanal, nos vemos la semana que viene para cerrar un mes de Octubre que va camino de batir todos los récords.


Un saludo, Víctor.

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